Lunes 29 Septiembre 2025

Gálatas 5:1, 4, 7, 13, 15-16, 18, 22-23

LECTURA DIARIA

La gracia nos levantó de la esclavitud y nos colocó firmes en la libertad de Cristo; no hay obra humana que pueda añadir a lo que ya fue consumado en el sacrificio de nuestro Señor Jesucristo. En esa gracia no vivimos atados a la carne ni a la ley, sino que caminamos guiados por el Espíritu, mostrando un fruto que brota de la restauración: amor, gozo, paz y todo lo que refleja la vida de Cristo en nosotros. La gracia no es permiso para pecar, sino poder para amar, servir y vivir en victoria. Hoy somos testigos de que donde reinaba el pecado, ahora sobreabunda la gracia, y que nuestra libertad no depende de lo que hacemos, sino de lo que Cristo ya hizo por nosotros.

Gálatas 5:1, 4, 7, 13, 15-16, 18, 22-23

Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud.

De Cristo os desligasteis, los que por la ley os justificáis; de la gracia habéis caído.

Vosotros corríais bien; ¿quién os estorbó para no obedecer a la verdad?

Porque vosotros, hermanos, a libertad fuisteis llamados; solamente que no uséis la libertad como ocasión para la carne, sino servíos por amor los unos a los otros.

Pero si os mordéis y os coméis unos a otros, mirad que también no os consumáis unos a otros. Digo, pues: Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne.

Pero si sois guiados por el Espíritu, no estáis bajo la ley.

Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.