Martes 09 Septiembre 2025
Proverbios 17 al 18; 1 Corintios 15:29-58
LECTURA DIARIA
Si no hubiera resurrección, todo carecería de sentido; pero la gracia de Dios nos asegura que nuestros esfuerzos no son en vano, porque vivimos para la eternidad. La gracia transforma lo débil y corruptible en gloria incorruptible. La gracia en Cristo nos da victoria eterna sobre la muerte. La gracia nos mueve a perseverar y edificar sin cansarnos, porque nada en Él es en vano.
La esperanza de la victoria final nos motiva a seguir edificando, aunque haya luchas, porque sabemos el final: Cristo ya venció la muerte.
1 Corintios 15:29, 32, 34, 42-43, 51-55, 57-58
De otro modo, ¿qué harán los que se bautizan por los muertos, si en ninguna manera los muertos resucitan? ¿Por qué, pues, se bautizan por los muertos?
Si como hombre batallé en Éfeso contra fieras, ¿qué me aprovecha? Si los muertos no resucitan, comamos y bebamos, porque mañana moriremos.
Velad debidamente, y no pequéis; porque algunos no conocen a Dios; para vergüenza vuestra lo digo.
Así también es la resurrección de los muertos. Se siembra en corrupción, resucitará en incorrupción. Se siembra en deshonra, resucitará en gloria; se siembra en debilidad, resucitará en poder.
He aquí, os digo un misterio: No todos dormiremos; pero todos seremos transformados, en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados. Porque es necesario que esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de inmortalidad. Y cuando esto corruptible se haya vestido de incorrupción, y esto mortal se haya vestido de inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra que está escrita: Sorbida es la muerte en victoria. ¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón? ¿Dónde, oh sepulcro, tu victoria?
Mas gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo. Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano.


